Ante los desafíos del 2025, este es el mensaje del sector nacional de ciberseguridad
El 2025 se vislumbra como un año lleno de desafíos en materia de ciberseguridad.
Es por ello que el Cybersec Cluster elaboró un resumen de las medidas que se deben tomar para lograr una mejor resiliencia y proactividad ante el cibercrimen.
Entre las consideraciones más importantes está romper el mito de que la ciberseguridad es solo para las empresas, estas buenas prácticas deben empezar desde casa, entre todos y así, poco a poco, irlas difundiendo.
La sugerencia se da ya que el eslabón más débil en la cadena de ciberseguridad siguen siendo los usuarios. Los ataques cibernéticos entran con simples engaños a través de correos maliciosos, enlaces falsos y montajes de llamadas. Lo que se puede hacer para enfrentarlos es difundir conocimiento, crear estrategias y protocolos en casa, en las empresas, sin importar el tamaño.
Todos somos potenciales blancos de un ciberataque. La clave para avanzar radica en compartir conocimiento y fomentar buenas prácticas, porque solo así podemos fortalecer nuestra capacidad para identificar y evitar engaños cibernéticos.
Asimismo, las empresas, independientemente de su tamaño, deben priorizar en sus estrategias para 2025 la incorporación de una cultura organizacional sólida en ciberseguridad. Estos pasos, aunque pequeños, son esenciales para garantizar la continuidad del negocio y enfrentar con éxito los desafíos del entorno digital, señaló Carolina Taborda, gerente general del Cybersec Cluster.
Estas son las predicciones en ciberseguridad para el 2025
Resiliencia y proactividad
El sector que representa al sector nacional de ciberseguridad detalla una serie de puntos clave para lograr resiliencia y proactividad, como una meta para este año.
A continuación, el resumen de los principales aspectos abordados:
- Cultura de ciberseguridad: Se abordó como un componente esencial. Este enfoque incluye la sensibilización de la población y la capacitación constante en todos los niveles, desde líderes organizacionales hasta usuarios finales. La resiliencia ante ciberataques requiere que las empresas y gobiernos adopten estrategias colaborativas y trabajen juntos para cerrar brechas de talento y recursos.
- Colaboración y alianzas internacionales: la cooperación entre actores públicos, privados y académicos es esencial para enfrentar desafíos globales en ciberseguridad. Iniciativas como el Centro Nacional de Ciberseguridad de República Dominicana y el Cybersec Cluster, han demostrado que el intercambio de inteligencia, la coordinación en la respuesta a incidentes y la implementación de buenas prácticas fortalecen la resiliencia regional. Eventos como el Cybersec Summit permiten consolidar estas relaciones y construir puentes que trascienden fronteras, fomentando el desarrollo sostenible y seguro.
- Modelo Zero Trust: este enfoque, central en la ciberseguridad moderna, establece que ninguna entidad, ya sea interna o externa, debe ser considerada confiable por defecto. Los principios clave incluyen: verificación explícita, limitar los accesos al mínimo necesario e incorporar factores de validación adicionales.
- Ciberseguridad potenciada por IA: la Inteligencia artificial (IA) es un aliado clave en la ciberseguridad, tanto en la detección como en la mitigación de amenazas. Soluciones como tecnologías de análisis conductual utilizan la IA para identificar patrones maliciosos y responder a ellos rápidamente. Sin embargo, se necesita regulación ética y prácticas responsables en su desarrollo y aplicación.
- Ransomware y amenazas emergentes: el ransomware continúa siendo una amenaza crítica, evolucionando hacia modelos como servicio que afectan infraestructuras críticas, por lo que es necesario aplicar segmentación de red y microsegmentación Zero Trust.
Hoy somos testigos de una evolución hacia métodos y modelos cada vez más sofisticados en la creación y ejecución de ciberataques. Frente a este panorama, las alianzas estratégicas y la colaboración se presentan como nuestras mejores herramientas para enfrentar estos desafíos. Apostar por estas medidas no solo refuerza nuestra capacidad de respuesta, sino que también traza el camino hacia una competitividad sostenible y un desarrollo verdaderamente resiliente, añadió Taborda Kruse.
El gremio concluyó diciendo que el ecosistema de ciberseguridad requiere un enfoque integral que combine colaboración internacional, implementación de modelos como Zero Trust, adopción ética de tecnologías avanzadas como la IA, y una cultura de ciberseguridad. “Solo a través de estos pilares se podrá afrontar la creciente sofisticación de las ciberamenazas”, concluyeron.